Milán multifacética. Una ciudad, varias maneras de definirla.

A Milán se la puede definir de tantas maneras como personas la conocen. Están quienes la aman y quienes no. Quienes viven acá desde que nacieron y quienes apenas llegaron. Quienes la ven como una ciudad industrial y quienes como la capital de la moda y el diseño. Están quienes dicen que es una ciudad antigua y quienes piensan que es moderna. Y los contrastes podrían continuar, pero de lo que no hay dudas, es que Milán es una ciudad multifacética.

Me mudé a Milán en agosto de 2016. Llegué sin conocerla y cargando una mochila de prejuicios ajenos. Con el tiempo entendí que la ciudad en los últimos años había mutado. Poco a poco había iniciado a convertirse en una ciudad absolutamente cosmopolita y llena de vida.

Muchas de esas referencias que me hacían de la ciudad ya no existían o al menos a mí no me afectaban.

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Milán Multifacética

Con motivo del Día Internacional de la Mujer, entrevisté a algunas mujeres que residen en Milán.

Son mujeres que conocen la ciudad. La viven día a día. La disfrutan (o no!) durante las 4 estaciones del año!.

No todas nacieron aquí, muchas llegaron por la universidad o por el trabajo. Algunas de ellas vivieron en otros países y otras siempre en Italia.

Todas respondieron las mismas preguntas y definieron lo que Milán significa para ellas.

Descubramos juntos cómo puede tener tantas definiciones diferentes y por qué Milán es multifacética.

Si tuvieses que definir a Milán en una palabra ¿cuál sería?

Milán es la ciudad de la innovación y de las Startup. De los encuentros de todo tipo, de networking y de personas que llegan desde cualquier parte. Es la ciudad donde todo es temporario y donde la moda es pasajera, mientras los pasajeros visten a la moda.

Milán es la ciudad de los niños adultos y de los adultos niños. Pequeños que hablan tres idiomas, que tienen una agenda ocupadísima, mientras están los adultos que nunca dejan de ser niños. Milán es una experiencia continua. ¡Hay que vivirla!

Así es como la describió Silvia (una milanés que vivió algunos años en Argentina y muchos más en España). Pero si tiene que elegir sólo una palabra es cosmopolita.

Y no es la única, porque Manuela, que vive en Milán desde hace catorce años, elegiría la misma.

Por otro lado, Carla es una enamorada de la ciudad, pero no fue siempre así.

Ella es de Cagliari, en la isla de Cerdeña, ciudad de mar. En el 2006 se mudó a Milán por la universidad. Luego vivió en el extranjero para finalmente regresar.  Al inicio no estuvo contenta con la decisión, pero con el tiempo comenzó a ver a la ciudad cambiar y evolucionar y fue así que comenzó a aparecer el amor.

Para Carla Milán es sinónimo de vanguardia.

Francesca, en cambio, es de Calabria, al sur de Italia. Se mudó a Milán hace 6 años y para ella se define como posibilidad.

Roberta es una milanés que tiene su corazón dividido entre las regiones de Lombardía y Umbria. Para ella Milán es una mujer por descubrir. Oculta su belleza en los patios, en los rincones escondidos, en las callecitas menos conocidas. Se hace amar con el tiempo, requiere curiosidad, paciencia y pasión.

Energía es la palabra elegida por Sara, otra milanés.

Ilaria, en cambio, vive en Milán hace tres años, es de Foggia, en la región de Puglia. Su palabra es incontentabile. Es insaciable, difícil de complacer.

Y las enamoradas de la ciudad continúan, Rossella se mudó a Milán hace siete años para estudiar en la universidad. Dice que si tuviese que definir a la ciudad en una sola palabra no tendría dudas: «isola» (isla) sería la definición más apropiada.

«Soy una milanese DOC, nacida en el centro de la ciudad», es como se presenta Silvia B. Sin embargo, no vivió siempre acá. Pero luego de un largo período de trabajo en el extranjero, decidió volver, buscando vivir la ciudad en un modo completamente distinto a la primera vez.

Ella necesita dos palabras para definir Milán: «Frizzante, Renovada».

«Precisamente porque vivo en Milán desde siempre. La ciudad ha cambiado muchísimo en los últimos cinco años (¡y para mejor!), convirtiéndose en un lugar lleno de vida, enérgico y frizzante.»

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Ahora me toca a mí, ¿es Milán un ciudad multifacética?

Disfruté leer las respuestas que cada una me fue dando. Es increíble ver como un mismo lugar puede ser percibido de formas tan diferentes.

Encontré similitudes a como la veo yo, y también descubrí nuevas maneras de mirarla.

Pero si yo tuviese que elegir una palabra para definir Milán sería hogar.

Y es que entre el 2014 y el 2016 viví en varias ciudades. Fue recién cuando me instalé acá que me volví a sentir en casa.

Cuando uno vive en el extranjero comienza a valorar (o incluso a reconocer) muchas cosas de su país o ciudad que mientras vive ahí no le da importancia. Buenos Aires es una ciudad que ofrece muchísimo y Milán me dio eso otra vez.

Gastronomía para todos los gustos y presupuestos. Museos de todo tipo (¡hasta de Fernet!). Parques en el medio de la ciudad que ayudan a escaparse por un rato del cemento. Un skyline moderno y a la vez edificios con cientos de años. Un superclásico para los amantes del fútbol y las semanas más elegantes y excéntricas para los amantes de la moda. Arte, arquitectura y diseño por donde mires. Podés viajar en un subte que se maneja sólo o en un tranvía que te transporta en el tiempo.

Es cierto que Milán puede ser definida de varias maneras (incluso opuestas), pero te queda alguna duda de que es una ciudad multifacética.